16 may 2010

Monster

Te conviertes en la sombra de lo que eres, en aquello de lo que huyes, la imagen de un espejo de feria, deforme. Ves que no eres tú mismo, buscas algo que te aferre al "yo" que conocías antes, algún punto de conexión. Nada, una simple cáscara es lo que compartes con ese ser incorrupto, limpio a tus ojos, completamente distinto a lo que eres ahora.
Un monstruo. Agresivo, destructor, insaciable. Tu sed de sangre, tu ansia de herir a otros no tiene fin. Te asustas de ti mismo, el terror recorre tus venas. Tanto tiempo ciego, sordo, insensible. Has cambiado tanto que ni te reconoces. Tratas de ocultar tu monstruo, ése que no puedes controlar. Te alejas de todos, la soledad se convierte en tu aliado.


Lo sientes bajo tu piel, en tu cabeza, corrompiendo tu sangre. Quiere salir de su encierro. Sería mucho más fácil dejarlo libre, romper su candado, acabar con tu sufrimiento. Pero una chispa de tu anterior "yo" vuelve a la vida, se enciende, su fuego se expande y te llena. Intentas domar a la bestia, a cualquier precio.
Felicidades, estás limpio. No volverá, a no ser que tú se lo permitas.

Escuchando: Monster - Skillet

0 comentarios:

Visitas

contador de visitas

Seguidores